miércoles, 22 de abril de 2009

Enunciados en contexto

ENUNCIADOS EN CONTEXTO
La communication et le sens. In: Yves Michaud (ed.) Qu'est-ce que l'humain? Université de tous les savoirs, volumen 2. (Paris: Odile Jacob, 2000. 119-128).
[traducción nuestra] “Entre los indicios que sirven para comunicarse, evidentemente hay indicios lingüísticos. Un enunciado es un indicio –un indicio particularmente compacto, rico y preciso- pero sólo un indicio del sentido intencional del locutor. No es una codificación de lo que queremos decir. El destinatario infiere el sentido intencional a partir del indicio codificado o no, y del contexto. Si el que comunica deja buena parte de la tarea inferencial a su interlocutor, no es porque se ha abstenido de todo codificar. Paradójicamente, los códigos de los seres humanos que son muchos más ricos que los de los animales, no son ni completos (en relación con los mensajes posibles) ni inequívocos. Los códigos humanos siempre son ambiguos e incompletos de modo que nunca permiten codificar plenamente lo que quieren decir. Esa es, al menos, la hipótesis del modelo inferencial de la comunicación humana en tres tesis:
1. El que comunica produce un indicio del sentido intencional.
2. El destinatario, en todos los casos, infiere este sentido intencional a partir del indicio y del contexto.
3. Un enunciado lingüístico es un indicio complejo del sentido intencional del locutor. No es une codificación de este sentido intencional.”
Efectivamente, no existe una correlación una a una entre oración y significado global pretendido. De modo que los hablantes hemos de echar mano del contexto para codificar y descodificar las inferencias que se esconden detrás de los enunciados locutivos; hemos de interpretar los actos ilocutivos que los acompañan. Así pues, en los ejemplos que presentamos a continuación, imaginemos un mismo enunciado en tres contextos distintos. Como variantes del contexto, nos proponemos aplicar el modelo etnográfico SPEAKING que Hymes teorizó en 1974. Recordemos que Hymes con este acrónimo recoge: el marco, los partipantes, los fines, la secuencia, el tono, el medio, las normas de interración y el género. Con el primer enunciado “¡Qué sueño tengo!” cambiaremos el factor marco y con el segundo “Eres un genio, realmente” cambiaremos el tono.
a) ¡Qué sueño tengo!
S1/ durante una proyección en un cine
S2/ al final de una fiesta de cumpleaños muy tarde
S3/ volviendo de una cena entre amigos
P/ una pareja
E/ (precisamente, queremos conocerla)
A/ Qué sueño tengo
K/ bostezando
I/ oral
N/ distendido
G/ conversación
Personalmente, creo que la intención del locutor y la inferencia que el interlocutor saca en cada contexto al cambiar únicamente el marco difieren en cada caso. Con S1, la intención de la locutora podría ser “me aburro”; con S2, “me estoy durmiendo, vámonos” y con S3 “hagamos el amor”.
b) Eres un genio, realmente
S/ en casa
P/ un padre y su hijo
E/ (es lo que estamos poniendo a prueba)
A/ Eres un genio, realmente
K1/ alegre
K2/ sarcástico
K3/ serio
I/ oral
N/ responsabilidad, poder, obediencia
G/ conversación
Aquí también creo que al modificar únicamente el factor tono, la interpretación del mismo enunciado cambio. Así por ejemplo, con K1, se podría interpretar como un halago sincero; con K2 como una burla y con K3 como una bronca.
En cualquier caso, confirma el hecho de que el contexto es fundamental para descodificar un mismo enunciado. Aunque el acto locutivo sea idéntico, la interpretación del acto ilocutivo depende de factores extralingüísticos, de modo que las respuestas perlocutivas también serán distintas.